lunes, 2 de marzo de 2015

CROQUETAS Y EMPANADILLAS CASERAS DE POLLO

Hace unos días os colgué la receta para unas riquísimas croquetas caseras con la "carn d'olla" que han tenido mucho éxito. Hoy os cuelgo cómo hacer unas, también riquísimas, croquetas de pollo y, de pasada, unas ricas empanadillas.

EMPANADILLAS DE POLLO
CROQUETAS DE POLLO
 














El método es básicamente el mismo que en las de caldo pero
solamente vamos a usar la carne del pollo, tomate, cebolla y la bechamel.

INGREDIENTES: (Para 6 personas)

3-4 pechugas de pollo
4 tomates maduros
 (yo compré una lata de tomates enteros y usé 4)
1 cebolla pequeña-mediana

Para la bechamel (ver receta, clicka croquetas caseras)

Si queréis aprovechar para hacer las empanadillas, necesitareis un paquete de obleas "La Cocinera", vienen 16.

PREPARACION:

Limpiamos las pechugas, las cortamos a dados y las ponemos a rustir, cuando las vemos que ya no están crudas añadimos los tomates y la cebolla cortada en tacos (luego se tritura todo). Una pizca de sal y lo dejamos acabar de rustir a fuego lento vigilando, lo vamos removiendo y los tomates los vamos chafando para que suelten el juguito.



Cuando está hecho, apartamos un par de tomates para que no quede demasiado suelta, y todo lo demás lo pasamos por la batidora. Si os gusta encontrar trocitos del pollo: dejáis unos trozos sin pasar y cuando pongáis la masa en el bol para dejarla reposar, cortáis los trozos bien pequeños y los mezcláis.

Preparáis la bechamel  y la añadís al bol de la masa, mezclamos todo con cuidado y lo dejamos reposar 24h. en la nevera (es más fácil trabajarla si está reposada).



Al día siguiente procedemos igual que en la otra receta, vamos cogiendo bolitas y les damos la forma, las rebozamos y, una de dos, las freímos y nos las comemos o bien las podemos dejar preparadas (sin freír) y congelarlas para dentro de unos días.

En mi caso usé 4 pechugas y me salió tanta masa que preparé también una buena bandeja de empanadillas, tenía un paquete de obleas y las rellené para ver qué tal quedaban... "¡que buenas empanadillas, mamá... ¿las has hecho tu?" Así que ya sabéis, aprovechad y tendréis dos platos arreglados. Como para las empanadillas no hace falta que la masa repose, las podéis tomar ese día y las croquetas para el siguiente.

Bueno, ya veis que no es nada complicado y, tanto las croquetas como las empanadillas quedan ¡deliciosas!

¡Que aproveche!



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