En primer lugar, mis disculpas por tardar tanto en publicar recetas y demás... ahora ya vuelvo a estar por aquí y espero que continuéis siguiendo mis publicaciones y que os gusten, claro está.
Estamos en pleno otoño y apetecen las comidas calientes. Ayer me pedían en casa que hiciese boniatos al horno y yo, rápidamente, hoy al hacer la compra he cogido algunos para empezar a saborearlos.
Como ya sabréis, el boniato es un tubérculo, o sea, de la familia de la patata. Es rico en hidratos de
carbono de absorción lenta y en beta-caroteno. Es un alimento de fácil digestión, antioxidante, nutritivo y contiene vitamina C, estupenda para nuestro organismo. Además, nos proporciona 0 grasas (SI, SI 0 GRASAS) y 90 calorías.
Hay
distintas posibilidades de preparación, el año pasado los hicimos como las patatas fritas para probarlos y gustaron aunque, como tampoco preparo muchas patatas fritas pues prefieren eso... que les haga la patata.
distintas posibilidades de preparación, el año pasado los hicimos como las patatas fritas para probarlos y gustaron aunque, como tampoco preparo muchas patatas fritas pues prefieren eso... que les haga la patata.
Como verdaderamente les gustan en casa son al horno y así os lo voy a explicar.
Compra la cantidad que desees según los comensales que seáis, si son de la medida que yo os pongo en la foto, pues contad uno por cabeza. Si son más grandes, suelen tomarse solo medio. Lo importante es que los escojáis todos más o menos iguales por el tema de la cocción, que se vayan a hacer todos bien.
Cogemos los boniatos y los pasamos bajo el agua, limpiando la piel por si hay restos de tierra. Los envolvemos uno a uno con papel de plata y los colocamos en la bandeja para el horno, que estará arriba y abajo, unos 60 minutos a 210º. Lo mejor es que sobre ese tiempo los pinchéis (típica prueba para la cocina al horno).
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| Aquí lo tenemos justo sacado del horno, lo abrís con cuidado de no quemaros y... A COMER!! |
Hasta luego!!
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